Yemen: El paraíso perdido...

Aún me acuerdo de hace un año cuando llegué aquí por primera vez, me recuerdo con los ojos siempre abiertos para no perderme nada, la ilusión por retratar con mis crónicas y mis fotos cada rincón y cada manera de vivir de este país…todo eso se ha perdido, al menos se ha difuminado por una lista, demasiado larga ya, de pequeñas-grandes cosas que me minan día a día y que difuminan los bonitos recuerdos. Soy consciente de que cuando pase un tiempo en Madrid, cuando haya recibido una buena dosis de mimos y me recupere del shock de la vida de antes, será cuando prevalezcan los buenos y bonitos recuerdos del Yemen, lo sé. Supongo que esto es una montaña rusa y estamos en época de bajada…y supongo y espero que pronto remontemos este Yemen gris que estamos viviendo.

Hace apenas 2 semanas que he regresado a mi rutina diaria de estudios después de que 3 grandes amig@s me vinieran a visitar. La verdad es que ha sido genial y supongo que cuando le enseño Yemen a alguien, es cuando más lo disfruto y cuando me reencuentro con la gente y el país. Afortunadamente, dos días después de que se marcharan mis amig@s la situación ya deteriorada del país se resquebrajó por completo. No sé si sabréis que en el norte del país hay una guerra. Una de las tribus más fuertes (los “hutis”) reclama la vuelta del imanato, si a esto le añadimos diferencias religiosas de por medio e intereses políticos y económicos…tenemos como resultado una mezcla explosiva, tan explosiva como que sin ir más lejos, los bombardeos llegaron a tan sólo 10 km de Sana’a y se escuchaban perfectamente. El gobierno no cuenta la verdad, los muertos se cuentan por centenas y hay controles y militares en máxima alerta cada pocos metros.

Lo más indignante de todo esto, es tenerme que enterar por ciudadanos de otras nacionalidades que corremos cierto peligro quedándonos aquí. Hace 2 meses los franceses y los americanos fueron los primeros en poner en sobre aviso de que algo se cocía y muchos de ellos se marcharon del país. En ese momento pensé que eran unos exagerados y paranoicos…los hechos les dan en parte la razón, y ahora lo preocupante es que la embajada italiana han llamado a sus ciudadan@s para informarles de que corren un serio peligro porque se esperan ataques indiscriminados en Sana’a, por un lado los “hutis”, por otro al-qaeda y por otro cualquier pirado que la tome con los extranjeros…

¿ Y los españoles? Buena pregunta. Parece mentira que tengamos 8 cadáveres a las espaldas, y nuestra embajada no haya movido ficha todavía. Mañana hay una reunión en la que supuestamente van a explicar qué pasa y cómo actuar en caso de evacuación, bla,bla,bla. A mi me parece indignante tenerme que enterar por terceras personas, nuestra inoperante cónsul en funciones, no ha tenido la decencia de llamarme. Me pregunto para qué me registré al llegar… resulta que tengo unos deberes como ciudadana española , pero no tengo derechos. Muy triste. Ojalá no me pase nada porque esto podría traer cola. La sensación que me queda es que para lo único que sirve esta embajada es para repatriar cadáveres. El jefe de la policía hace oídos sordos a las reacciones italianas, está claro que su único objetivo es la vida del señor embajador y de la pseudos-cónsul. Si fuera un tipo despierto y que vive la calle tendría credibilidad, pero resulta que es una persona que no sale de la embajada para casi nada, que está mirando para dentro, y el peligro viene de fuera…Me veo en la obligación de poner una queja, está muy feo y lo que más me fastidia, es que seguro que la muy incompetente lo hace porque vivo con Alicia y no la soporta, de hecho la tiene acosada laboralmente hablando. Menos mal que tengo a Alicia que ella sí que se lo curra. Supongo que mañana alguien me contará como debo proceder en caso de que esto se ponga chungo, yo espero que no suceda, de hecho la vida sigue como si nada. Me sigo tomando mis zumitos y mis tés, sigo visitando a Abdallah, aparentemente nada ha cambiado y confiemos en que esto se sostenaga y no vaya a más. Supongo que estaréis flipando porque nada de esto llega a las Españas, y más ahora con el fútbol, el pensamiento único por excelencia…En fin, no os cuento más y prometo ponerme las pilas y contaros cómo se vive en una situación tan diferente.

Mil abrazos.