sábado, 30 de junio de 2007

KIT versus QAT...


Este finde me he vuelto a quedar en Sana’a, el director de la escuela nos había invitado a los nuevos estudiantes a comer a su casa y me parecía un feo no ir, bastante con ser la protestota de la limpieza, no? Fue un poco patético la verdad, habíamos quedado a las 12 y justo cuando llega la hora de salir, siento que el agujero me llama…Dios! Por supuesto acudí a la llamada…una no sabe cuando va a volver a ser convocada, pero tuve la mala suerte de salpicarme los pantalones…(la verdad es que es algo habitual, no le pillo el truquillo a esto). Osea, encima de llegar tarde, llego con los pantalones salpicados de pis, miro a mi alrededor, y resulta que soy la única chica que no lleva el velo…nuevas caras americanas que empiezan a darme la mano, mano que por cierto, no me ha dado tiempo a lavar…empiezo a ponerme nerviosa, me da la risa floja pero no tengo a nadie con quien compartir tan ridícula situación. En fin, una vez sentada en el bus que nos llevó a la casa de este hombre (a tomar por saco, por cierto) empiezo a darme cuenta de mi automarginación, todo el mundo hablando en inglés y yo a verlas venir. Tuvimos el típico momento patético de estar todos en círculo y tener que presentarnos…odio esos momentos! La verdad es que la comida estuvo rica, pero yo iba contando los minutos para que aquello acabase.

Por la tarde nos fuimos a masticar Qat. Para los que no sabéis lo que es, podríamos decir que es la droga oficial de Yemen. Es legal y todos los hombre lo toman, la verdad es que resulta patético a veces. Muchos tirados en la calle, vendiendo cualquier cosa…y siempre con la bola de Qat a un lado de la boca. Ésta fue la tercera vez que lo tomaba y la que menos me ha gustado. La primera tuvo su sentido, estaba agotada y me resucitó bastante, la tomé para estudiar…y no es broma, me ayudó. Me vinieron recuerdos del famoso Katovit….en realidad es como meterse un chute de cafeína, nada más, yo no vi elefantes rosas ni me flipe con nada, eso sí, despeja las penas y las preocupaciones. Quizás sea por eso que la gente de aquí lo toma, para olvidarse de su realidad y sobrellevar el peso de la vida. La manera de tomarlo es parecida a la de las vacas comiendo hierba, lo acumulas en un lado de la boca y empiezas a formar una bola. No lo debes tragar y se debe tomar agua de vez en cuando. Ya os enseñaré alguna foto de todo el proceso...

A estas alturas de junio ya debería saber algo de mi futuro en Madrid, pero aún sigo a la espera de saber si me han admitido en el curso de mediación intercultural o no. Creo que pinta en bastos, y empiezo a maquinar con la idea de volver a Yemen pero por más tiempo. Está claro que Madrid no me quiere, no sé a qué volver y me vendría muy bien aprender más árabe. Primero intentaría lo de Irán…eso sí que molaría, menudas Crónicas Iranias podría escribir en compañía del Mártir del Chelo Kebab que tenemos por aquellas tierras …Ya se verá, todo es especular porque no sé nada.

Kit, ven a buscarme...tenemos un problema.

Disfrutad de vuestro finde y tomaros unas cañitas por mí!

Besos mil


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2 comentarios:

Anónimo dijo...

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Beaaaaaaaaa!!!!!!!! Si yo te entiendo, pero,¿¿¿¿¿¿Tiene que ser TAN lejos????? Sí, ya sé, allí se aprende bien árabe, pero... Pero... No sé qué decir, estoy confusa. Si yo te entiendo..... Besos niña, a ver si hablamos.
P.D. No, mejor dicho,¡Tenemos que hablar! Más besos linda

Anónimo dijo...

Beii!!!Qué bueno hablar esta mañana...tan lejos y tan cerca te he sentido, por eso cuando te decía lo de he quedado con Sara y Paula pensaba en ti..

un besazo